La mañana del 29 de mayo de 2025, València se convirtió en el epicentro de una manifestación histórica que reunió a miles de personas en la Estación del Norte. Convocada por sindicatos como Intersindical Valenciana, CGT, CNT y COS, la marcha tuvo como objetivo principal protestar contra la gestión de la reciente catástrofe provocada por la dana del 29 de octubre. Desde las 12:15 horas, los manifestantes comenzaron a llenar las calles, alzando sus voces con consignas que resonaban en todo el centro de la ciudad, tales como «el president, a Picassent» y «no son morts, son assesinats».
La jornada se desarrolló bajo un sol abrasador, pero eso no impidió que los participantes, portando banderas de diferentes sindicatos y carteles en contra del jefe del Consell, Carlos Mazón, expresaran su descontento. Los líderes de las organizaciones convocantes catalogaron la manifestación como un «éxito» y «histórica», destacando la importancia de la participación ciudadana en la lucha por sus derechos. Juan Miguel Font, secretario general de CGT-Valencia, subrayó que no se recordaba una huelga general de tal magnitud en mucho tiempo, y que esta había sido un triunfo para la ciudadanía valenciana.
### Un Clamor por Justicia y Reparación
La manifestación no solo fue una expresión de descontento, sino también un llamado a la justicia y reparación por las 230 víctimas que dejó la riada y sus consecuencias. Beatriu Cardona, portavoz de Intersindical, enfatizó que la huelga no era una ocurrencia aislada, sino un clamor unánime de la sociedad valenciana que ha sufrido una de las peores catástrofes en su historia reciente. La movilización fue vista como una respuesta necesaria ante la falta de acción y apoyo por parte de las autoridades, quienes han sido criticadas por su gestión de la crisis.
La huelga general, que se extendió por varios sectores, tuvo un impacto significativo en el transporte público, siendo la EMT y FGV las más afectadas. Los piquetes organizados en diferentes áreas de la ciudad lograron paralizar gran parte de la distribución en Mercavalencia, lo que demuestra la efectividad de la movilización. Mar Bueno, representante de CNT Valencia, defendió la marcha como una vía para «defender nuestros derechos», mostrando orgullo por la respuesta del pueblo valenciano y su clase trabajadora.
### La Respuesta del Gobierno y el Futuro de la Movilización
A medida que la manifestación avanzaba, las voces de los manifestantes se unían en un coro de exigencias hacia el gobierno regional. Ángel Muñoz, otro de los portavoces, destacó la importancia de continuar la lucha hasta que se logren cambios significativos y se detengan los recortes del Consell. La jornada de huelga fue vista como un primer paso hacia un movimiento más amplio que busca no solo justicia por las víctimas de la dana, sino también una revisión de las políticas que han llevado a la precariedad en la que se encuentran muchos ciudadanos.
La respuesta del gobierno, liderado por Carlos Mazón, ha sido objeto de críticas. A pesar de que el presidente afirmó que su objetivo era aprobar los presupuestos y que lo había conseguido, muchos ciudadanos sienten que esto no es suficiente ante la magnitud de la crisis que enfrentan. La percepción de que las autoridades no están haciendo lo suficiente para abordar las necesidades de la población ha alimentado el descontento y la movilización social.
La manifestación del 29 de mayo no solo fue un evento aislado, sino que se inscribe en un contexto más amplio de descontento social en València y en toda España. La combinación de crisis económicas, desastres naturales y la percepción de inacción gubernamental ha llevado a un aumento en la organización y movilización de la ciudadanía. Los sindicatos y grupos sociales están cada vez más unidos en su lucha por derechos laborales y justicia social, lo que sugiere que este tipo de movilizaciones podrían convertirse en una constante en el futuro cercano.
La jornada culminó con un ambiente de esperanza entre los manifestantes, quienes se comprometieron a seguir luchando por sus derechos y a no permitir que las voces de las víctimas sean olvidadas. La masiva participación en la manifestación del 29M es un claro indicativo de que la sociedad valenciana está dispuesta a alzar la voz y exigir cambios significativos en su entorno. La lucha por la justicia y la reparación continúa, y València se ha posicionado como un ejemplo de resistencia y unidad frente a la adversidad.