El inicio del nuevo curso escolar en Alicante ha estado marcado por una serie de protestas organizadas por los sindicatos de la enseñanza pública, quienes han expresado su descontento ante los recortes en la Formación Profesional (FP). Este lunes, los principales sindicatos se concentraron frente a la Dirección Territorial de Educación para exigir una FP de calidad y sin recortes. La jornada comenzó con un paro del profesorado, que aunque no tuvo un gran impacto en los centros educativos, sentó las bases para una manifestación que reunió a numerosos docentes y representantes sindicales.
Las demandas de los sindicatos son claras: quieren que la FP semipresencial vuelva a contar con 30 horas semanales, así como un incremento significativo en las horas dedicadas a tutorías y coordinaciones académicas. Además, exigen una mejora en la remuneración y la dotación de recursos materiales y humanos suficientes para garantizar una educación pública de calidad. Según los representantes de Stepv, UGT, CGT y CSO, la reducción de horas ha llevado a una falta de docentes en los centros, lo que afecta directamente la calidad de la enseñanza.
Uno de los puntos más críticos de la protesta es la decisión de la Conselleria de Educación de no pagar la carga curricular completa de los módulos, algo que los sindicatos consideran insólito y sin precedentes en el ámbito educativo. Esta medida ha generado una gran preocupación, ya que implica recortes en horas clave como tutorías, coordinaciones y formación en empresas, lo que a su vez incrementa la carga burocrática para los docentes. La falta de recursos y la reducción de horas están creando un entorno educativo complicado, donde los docentes se ven limitados en su capacidad para atender adecuadamente a los alumnos.
La situación se complica aún más con la falta de contratación de profesorado experto, que es fundamental para la buena docencia en los ciclos más técnicos y en los cursos de especialización. Con la implementación del Decreto 97/2025, se ha establecido una reducción en las horas y retribuciones del profesorado, lo que ha generado un clima de incertidumbre y descontento entre los docentes.
Impacto en la plantilla docente
Los cálculos del sindicato Stepv indican que, debido a la reducción de cinco horas semanales en los ciclos formativos, los centros educativos de FP en Alicante podrían perder hasta 70 docentes. A esto se sumaría la pérdida de otros 30 docentes en las Escuelas Permanentes de Adultos de la provincia. Esta situación ha llevado a los sindicatos a organizar protestas en las tres capitales de provincia de la Comunidad Valenciana durante el verano, buscando visibilizar su descontento y exigir cambios.
Por otro lado, la Conselleria ha defendido su postura argumentando que ha incrementado el número de docentes en los últimos tres años, con un aumento de más de 1.500 profesores. Sin embargo, los sindicatos consideran que este aumento no compensa las pérdidas que se están produciendo debido a los recortes en horas y recursos.
La alta demanda de Formación Profesional en Alicante
A pesar de la controversia, la demanda de Formación Profesional en Alicante sigue en aumento. La Conselleria ha anunciado que este curso se han ofertado 60.664 plazas para alumnos, lo que representa un incremento del 3,9% respecto al año anterior. Además, se han creado nuevos ciclos formativos y se han abierto dos centros integrados de FP en la provincia: El Palmeral en Orihuela y el Leonardo Da Vinci en Alicante.
Este aumento en la oferta educativa contrasta con las quejas de los sindicatos, quienes argumentan que la calidad de la educación se ve comprometida por los recortes. La FP es vista como una vía esencial para que los jóvenes adquieran habilidades y conocimientos que les permitan insertarse en el mercado laboral, y los recortes en horas y recursos pueden tener un impacto negativo en su formación.
La situación en Alicante refleja un problema más amplio en el sistema educativo español, donde los recortes y la falta de inversión en educación han generado un clima de tensión entre las autoridades educativas y los docentes. La lucha por una educación de calidad y digna continúa, y las protestas en Alicante son solo un ejemplo de cómo los sindicatos están tratando de hacer oír su voz en un contexto de cambios y desafíos en el ámbito educativo.