En la calle Barítono Paco Latorre, ubicada en el barrio de Colonia Requena de Alicante, los residentes de un edificio enfrentan una situación alarmante. Desde hace años, el agua se filtra de manera constante en un sótano que, además, fue construido de forma ilegal por el anterior propietario. Este problema ha generado una creciente preocupación entre los vecinos, quienes temen que la situación pueda derivar en un desalojo por riesgo estructural.
La filtración de agua, que parece no tener un origen claro, ha comenzado a afectar tanto el terreno como los cimientos del inmueble. Jon Irazabal, uno de los vecinos afectados, comenta: «Cada vez que llueve, el agua termina en el sótano. Se han realizado catas e inspecciones, pero el agua sigue entrando. Nadie nos dice por qué». Este sótano, que se encuentra oculto tras un armario y no forma parte oficialmente del edificio, ha dificultado las inspecciones y las intervenciones técnicas necesarias para abordar el problema.
### Un Sótano Ilegal y Costos Elevados
La situación se complica aún más debido a que el sótano en cuestión fue construido sin los permisos correspondientes. La pequeña habitación de aproximadamente tres metros cuadrados se ha convertido en un foco de problemas. Los vecinos han tenido que recurrir a empresas externas para vaciar el sótano, lo que ha generado un gasto significativo. «Cada vez que llamamos a una empresa para vaciarlo, pagamos entre 250 y 300 euros. Ya hemos superado los 1.000 euros en facturas», explica Irazabal. Recientemente, se extrajeron 17.000 litros de agua con la ayuda de camiones cisterna, pero desde entonces, los residentes han tenido que asumir la tarea de achicar el agua por su cuenta, utilizando bombas y mangueras.
La humedad acumulada en el sótano no solo es un inconveniente económico, sino que también representa un riesgo para la salud de los residentes. Rosario Barea, otra vecina del edificio, señala que la situación es insostenible: «Cada vez que conseguimos vaciarlo, a las pocas semanas vuelve a llenarse. Huele fatal. Tenemos que tener los baños cerrados y echar productos porque es insoportable». La angustia de los vecinos se agrava al considerar la posibilidad de ser desalojados debido a los daños estructurales que podría estar causando la humedad en los cimientos del edificio.
### Evaluaciones Técnicas y Recomendaciones
Las inspecciones realizadas por empresas privadas y organizaciones como Arquitectura Sin Fronteras han coincidido en que el origen del agua parece estar fuera del edificio afectado. Según un informe, se han revisado las acometidas de la comunidad y no se han detectado fugas. Sin embargo, en la ladera que se encuentra justo encima del inmueble, se han observado signos claros de humedad y vertidos. El informe también destaca que hay zonas de la ladera con vegetación anegada y muros con filtraciones visibles.
El impacto estructural de esta situación es preocupante. El informe técnico de Arquitectura Sin Fronteras indica que hay una bolsa constante de humedad junto a la base del edificio, lo que podría estar dañando la estructura del inmueble. Además, el diseño del patio trasero, que carece de una correcta canalización del agua, agrava la situación. Las paredes exteriores del edificio muestran signos evidentes de deterioro, lo que aumenta la urgencia de una solución.
A pesar de la gravedad del problema, hasta el momento no se han tomado medidas concretas. Arquitectura Sin Fronteras ha remitido su informe al departamento de Conservación de Inmuebles del Ayuntamiento de Alicante, sugiriendo la necesidad de realizar un análisis del agua acumulada para identificar su origen y estudiar posibles consumos anómalos en los edificios superiores. Los vecinos, por su parte, continúan soportando los gastos y el estrés que esta situación les genera.
«Estamos haciendo todo lo que podemos», insiste Irazabal. «Pero sentimos que si esto sigue así, el edificio no va a aguantar. No entendemos cómo, siendo un problema que parece venir de fuera, tenemos que asumir nosotros las consecuencias. Solo queremos una solución antes de que sea tarde». La situación en este edificio de Alicante es un claro ejemplo de cómo problemas estructurales pueden afectar la calidad de vida de los residentes, y la necesidad urgente de una intervención adecuada para evitar daños mayores.