La celebración de las Hogueras en Alicante, un evento que atrae a miles de visitantes cada año, ha puesto de manifiesto una problemática que afecta a los residentes de la calle General Lacy. Esta vía, que se convierte en un punto neurálgico durante las festividades, ha sido objeto de quejas por parte de los vecinos, quienes denuncian que se transforma en una «ratonera» debido a la acumulación de barracas, hogueras y vehículos mal estacionados. A pesar de las numerosas reclamaciones, el Ayuntamiento parece ignorar las preocupaciones de la comunidad, dejando a los residentes en una situación de vulnerabilidad.
La situación en General Lacy se agrava cada año durante las Hogueras. Los vecinos han expresado su frustración al ver cómo sus accesos se ven bloqueados por las instalaciones temporales que se montan para las festividades. Desde la barraca El Cabasset, que ha sido premiada por su diseño, hasta otros puntos de la calle, los residentes se encuentran atrapados entre las vallas y los vehículos, lo que dificulta no solo su movilidad, sino también el acceso de los servicios de emergencia. La falta de respuesta por parte del Ayuntamiento ha llevado a muchos a cuestionar la seguridad de la zona, especialmente en un evento donde la afluencia de personas es masiva.
### La Voz de los Vecinos y Comerciantes
Los comerciantes de la zona son también víctimas de esta situación. Uno de ellos, Alejandro Pérez, ha compartido su experiencia, señalando que incluso han tenido que lidiar con emergencias, como el desmayo de un cliente debido al calor extremo. La imposibilidad de acceder a la calle con una ambulancia ha generado un clima de angustia y preocupación entre los comerciantes y residentes. «La calle es una ratonera», afirma Pérez, quien también menciona que muchos clientes han tenido que dar rodeos para acceder a sus garajes, lo que ha afectado negativamente a los negocios locales.
Las quejas de los vecinos son constantes y variadas. Algunos han colocado carteles en las entradas de los garajes, advirtiendo sobre la imposibilidad de acceso durante las festividades. Mensajes como «El servicio de limpieza pública: ubicación retirada temporalmente» son un claro reflejo de la desorganización que reina en la zona durante las Hogueras. A pesar de que el Ayuntamiento asegura que las barracas cuentan con los permisos necesarios, los residentes continúan sintiéndose desprotegidos y olvidados.
La falta de medidas efectivas para mitigar el impacto de las festividades en la vida cotidiana de los vecinos ha llevado a muchos a cuestionar la planificación del evento. La instalación de un escenario móvil en una de las barracas, que permitiría el acceso de emergencias, no es suficiente para calmar los temores de los residentes. La realidad es que, en caso de una urgencia, los servicios de emergencia tendrían que lidiar con la congestión y el desorden que caracteriza a la calle durante estos días.
### La Respuesta del Ayuntamiento
A pesar de las quejas y la evidente necesidad de una solución, el Ayuntamiento ha mantenido su postura de que las festividades deben continuar tal como están planificadas. Las autoridades locales han argumentado que las Hogueras son una tradición arraigada en la cultura alicantina y que los permisos otorgados a las barracas son parte de esta celebración. Sin embargo, esta justificación no ha sido bien recibida por los vecinos, quienes sienten que su seguridad y bienestar están siendo sacrificados en el altar de la festividad.
La falta de acción por parte del Ayuntamiento ha llevado a algunos residentes a organizarse y buscar soluciones alternativas. Se han planteado propuestas que incluyen la reubicación de las barracas o la implementación de un plan de tráfico que garantice el acceso a los edificios y garajes. Sin embargo, hasta ahora, estas iniciativas no han logrado captar la atención de las autoridades, lo que ha dejado a los vecinos sintiéndose impotentes ante una situación que consideran insostenible.
Las Hogueras de Alicante son un evento que, sin duda, aporta alegría y color a la ciudad, pero es fundamental que se tomen en cuenta las necesidades y preocupaciones de los residentes de General Lacy. La seguridad y el bienestar de la comunidad deben ser una prioridad, y es responsabilidad del Ayuntamiento encontrar un equilibrio entre la celebración y la vida cotidiana de los ciudadanos. Mientras tanto, los vecinos seguirán luchando por ser escuchados y por recuperar la tranquilidad en su calle durante las festividades.