La situación en Gaza ha alcanzado un nuevo nivel de tensión tras el reciente ataque del Gobierno de Israel, que ha reanudado su ofensiva militar en la región. Este ataque, que se produjo en la madrugada del 18 de marzo, marca el mayor bombardeo desde que se estableció una tregua hace dos meses, lo que ha llevado a la ruptura del alto el fuego que había prevalecido hasta ahora. Las consecuencias de este conflicto se sienten no solo en Gaza, sino también en la frontera sirio-libanesa, donde Israel ha intensificado sus operaciones militares.
### La Intensificación de los Ataques y sus Consecuencias
El Ministerio de Defensa de Israel ha informado que el país ha exportado más armas que nunca en 2024, alcanzando un valor total de 14.795 millones de dólares, lo que representa un aumento del 13% en comparación con el año anterior. Este incremento en la industria armamentística israelí coincide con un aumento significativo en las exportaciones hacia Europa, que pasaron del 35% en 2023 al 54% en 2024. Esta tendencia ha generado preocupaciones sobre el papel de Israel en el comercio de armas y su impacto en los conflictos regionales.
En el contexto del conflicto, al menos 18 palestinos han muerto en un ataque reciente en una escuela en Jan Yunis, donde se habían establecido tiendas de campaña para desplazados. Este ataque ha sido calificado de inaceptable por diversas organizaciones humanitarias, que han denunciado la falta de protección para los civiles en medio de la escalada de violencia. Las fuentes médicas han confirmado que el ataque fue llevado a cabo por un dron israelí, lo que ha suscitado un fuerte rechazo tanto a nivel local como internacional.
Además, decenas de israelíes han comenzado un viaje a pie de tres días hacia Gaza para protestar por la guerra, organizado por el grupo israelí-palestino Standing Together. Esta marcha busca llamar la atención sobre el sufrimiento de los palestinos y la necesidad de un alto el fuego duradero. Los organizadores esperan que más personas se unan a la causa, incluidos familiares de rehenes israelíes, lo que refleja la creciente disconformidad entre la población israelí respecto a la política del gobierno en relación con Gaza.
### Reacciones Internacionales y el Futuro del Conflicto
La comunidad internacional ha estado observando de cerca la situación en Gaza, y se espera que la Autoridad Palestina presente una resolución en la ONU en colaboración con España para abordar la crisis humanitaria en la región. El embajador palestino ante la ONU, Riyad Mansur, ha expresado su agradecimiento por el apoyo español y ha indicado que el borrador de la resolución está casi listo para ser presentado. Esta iniciativa busca generar un debate sobre la situación en Gaza y presionar a la comunidad internacional para que actúe en favor de una solución pacífica.
Por otro lado, el Ejército israelí ha confirmado que la Fundación Humanitaria para Gaza (GHF) no repartirá comida en el enclave debido a las condiciones de seguridad. Esta decisión ha sido criticada por organizaciones que trabajan en la región, ya que la población civil enfrenta una crisis humanitaria sin precedentes. La falta de acceso a alimentos y suministros básicos agrava aún más la situación de los desplazados y los afectados por el conflicto.
La oposición israelí también ha comenzado a tomar medidas, anunciando su intención de solicitar la disolución del Parlamento, lo que podría llevar a elecciones anticipadas. Esta situación política interna refleja la creciente presión sobre el gobierno de Netanyahu, especialmente en un momento en que la violencia y el conflicto en Gaza están en el punto de mira de la opinión pública.
En el ámbito militar, las Fuerzas de Defensa de Israel han llevado a cabo ataques en el sur de Siria en respuesta al lanzamiento de proyectiles desde ese país. Este desarrollo marca un aumento en las hostilidades en la región, lo que podría tener repercusiones significativas para la estabilidad en Oriente Próximo. La escalada de ataques y la respuesta militar de Israel han generado temores sobre un conflicto más amplio que podría involucrar a otros actores regionales.
La situación en Gaza sigue siendo crítica, con un alto costo humano y una creciente presión internacional para encontrar una solución pacífica. A medida que las tensiones aumentan, la comunidad internacional se enfrenta al desafío de mediar en un conflicto que ha perdurado durante décadas y que ha dejado a millones de personas atrapadas en un ciclo de violencia y sufrimiento.