La Playa de San Juan, un lugar emblemático de Alicante, se ha convertido en el escenario de un fenómeno social que ha cobrado fuerza en los últimos años: el botellón. Este ritual de reunión entre jóvenes, que tradicionalmente se limitaba a los fines de semana, ha encontrado un nuevo espacio en los martes, transformándose en una cita semanal que atrae a numerosos jóvenes, muchos de ellos menores de 21 años. La situación ha generado un creciente malestar entre los vecinos, quienes ven cómo sus noches se ven alteradas por el ruido y el desorden.
La llegada de la noche en Playa de San Juan es un espectáculo que se repite cada martes. A partir de las 22:00 horas, grupos de jóvenes comienzan a llegar a la zona, cargando con bolsas llenas de botellas, hielos y vasos desechables. El parque de la avenida de las Naciones se ha convertido en el punto de encuentro habitual para aquellos que buscan disfrutar de la «previa» antes de entrar a las discotecas. Este fenómeno, que ya era conocido durante los fines de semana, ha encontrado en los martes una nueva oportunidad para expandirse.
### La atracción de los martes: una noche especial para los jóvenes
La razón detrás de este auge de los botellones en martes radica en la política de acceso de las discotecas locales. Este día es el único de la semana en que los menores de 21 años pueden entrar a los locales más populares de la zona sin pagar entrada. Esta exclusividad ha llevado a que muchos jóvenes se reúnan en el parque desde las 22:00 horas, disfrutando de bebidas alcohólicas como ron, ginebra o vodka mezcladas con refrescos, mientras socializan y se preparan para la noche que les espera.
Pablo, un joven que asiste regularmente a estos encuentros, explica que la mayoría de su grupo de amigos acude al botellón porque es una oportunidad única para ellos. «Venimos toda la clase del instituto, siempre salimos juntos, somos muy piña», dice. Esta dinámica se repite entre muchos otros jóvenes, quienes ven en el botellón de los martes una forma de disfrutar de su verano, socializar y, sobre todo, aprovechar la entrada gratuita a las discotecas antes de la medianoche.
Sin embargo, esta nueva tradición no ha pasado desapercibida para los residentes de la zona. Los vecinos han comenzado a expresar su frustración por el ruido y la suciedad que generan estos encuentros. La situación ha llevado a que la Asociación de Vecinos de Playa de San Juan solicite mayor control y medidas más efectivas para frenar el botellón. José Caracena, presidente de la asociación, ha manifestado que el ambiente de inseguridad y malestar que se genera afecta tanto al descanso de los residentes como a la limpieza del área.
### La respuesta de las autoridades y la resistencia de los jóvenes
A pesar de la presencia de la Policía Local, que intenta controlar la situación, los jóvenes parecen encontrar formas de eludir las normas. La policía realiza rondas en el parque, retirando bebidas alcohólicas y pidiendo a los asistentes que abandonen la zona. Sin embargo, muchos jóvenes logran ocultar sus botellas en áreas ajardinadas, esperando que la policía se retire para continuar con su fiesta. Esta dinámica ha generado un ciclo de frustración tanto para los vecinos como para las autoridades, quienes se ven incapaces de erradicar el fenómeno.
Los comercios y hoteles cercanos también se han visto afectados por el botellón. La acumulación de basura, botellas y cristales rotos en las inmediaciones ha llevado a algunos establecimientos a reforzar su seguridad y vigilancia nocturna. Desde el Hotel Alicante Golf, han expresado su preocupación por la situación, solicitando un aumento de la presencia policial en la zona para evitar altercados y mantener la seguridad de sus huéspedes.
La Asociación de Vecinos ha propuesto un enfoque más integral que no solo contemple la presencia policial, sino también sanciones más severas y la creación de alternativas de ocio saludables para los jóvenes. Caracena ha enfatizado que no están en contra de la diversión de los jóvenes, sino que buscan un equilibrio que permita la convivencia pacífica en la comunidad.
El fenómeno del botellón en Playa de San Juan no se limita a los martes. Otros puntos de concentración de jóvenes han surgido en la zona, como los parques de la avenida de los Países Escandinavos y el barranco del Juncaret. Los horarios de mayor afluencia suelen ser entre la 01:30 h y las 03:00 h, especialmente los fines de semana, lo que agrava aún más la situación para los residentes.
La creciente popularidad del botellón en Playa de San Juan refleja un cambio en las dinámicas sociales de los jóvenes, quienes buscan espacios de diversión y socialización. Sin embargo, este fenómeno plantea importantes desafíos para la comunidad y las autoridades, que deberán encontrar soluciones efectivas para garantizar la convivencia y el bienestar de todos los habitantes de la zona.
