La Comunitat Valenciana ha experimentado un notable crecimiento en la construcción de piscinas, con un incremento de 2.000 nuevas instalaciones en el último año. Este fenómeno se produce en un contexto de creciente preocupación por el cambio climático y las olas de calor que afectan a la región. Con un total de 252.704 piscinas al aire libre, la Comunitat Valenciana se posiciona como la segunda comunidad autónoma con más piscinas en España, solo superada por Andalucía, que cuenta con 320.653. Este auge en la construcción de piscinas no solo refleja un cambio en las preferencias de los ciudadanos, sino que también plantea interrogantes sobre el uso del agua y la sostenibilidad en un contexto de sequía.
La distribución de estas instalaciones no es homogénea en todo el territorio. La provincia de Alicante se destaca como la que alberga la mayor cantidad de piscinas, con 130.813, lo que representa más de la mitad del total en la Comunitat. En contraste, la provincia de Valencia tiene 102.095 piscinas, mientras que Castellón apenas alcanza las 20.000. Este desequilibrio se acentúa en las comarcas costeras, donde la densidad de piscinas es significativamente mayor, coincidiendo con el mayor peso poblacional de la costa en comparación con el interior.
### La Densidad de Piscinas en Alicante
La provincia de Alicante no solo lidera en el número total de piscinas, sino que también presenta una impresionante ratio de piscinas por habitante. Con una población de aproximadamente 1.901.594 habitantes, la provincia tiene una piscina por cada 14 personas. Este ratio se vuelve aún más sorprendente en localidades turísticas como Teulada, Benissa y Xàbia, donde la densidad de piscinas es casi una por cada tres habitantes. En Xàbia, por ejemplo, se registran más de 9.275 piscinas, lo que la convierte en la localidad con mayor número de instalaciones en toda la Comunitat Valenciana. Para poner esto en perspectiva, Xàbia tiene la mitad de piscinas que toda la provincia de Castellón, a pesar de que esta última tiene una población significativamente menor.
El crecimiento de piscinas en Alicante no es un fenómeno aislado. En el Camp de Túria, por ejemplo, se han declarado 613 nuevas piscinas en el último año, lo que indica que la tendencia de construcción de piscinas se extiende más allá de las áreas costeras. Las comarcas con un carácter residencial, que incluyen chalets y grandes complejos, son las que más han visto crecer el número de instalaciones. Esto sugiere que la demanda de piscinas está impulsada por un estilo de vida que prioriza el ocio y la comodidad en el hogar.
### Desigualdades en la Distribución de Piscinas
A pesar del auge en la construcción de piscinas, existen áreas en la Comunitat Valenciana donde la situación es muy diferente. En Castellón, por ejemplo, la densidad de piscinas es notablemente baja. De hecho, por cada doce piscinas en la Comunitat Valenciana, solo una se encuentra en Castellón. Las localidades costeras como Castelló, Benicàssim y Vinaròs concentran casi la mitad de las piscinas de la provincia, mientras que el interior presenta una escasez alarmante de estas instalaciones.
Curiosamente, hay diez municipios en la Comunitat Valenciana que no cuentan con ninguna piscina exterior. Estos incluyen Alfara de la Baronía, Ares del Maestrat y Castell de Cabres, entre otros. Para los residentes de estas áreas, sobrevivir al calor del verano se convierte en un desafío, llevando a algunos a buscar refugio en piscinas de otras comunidades autónomas. Por ejemplo, Raquel, una joven de la Puebla de San Miguel, ha compartido su experiencia de tener que conducir 30 minutos para acceder a una piscina en Riodeva, Aragón, para escapar de las altas temperaturas.
Este contraste en la disponibilidad de piscinas plantea preguntas sobre la equidad en el acceso a espacios recreativos y la necesidad de políticas que fomenten la construcción de instalaciones en áreas menos favorecidas. A medida que el cambio climático continúa afectando a la región, es probable que la demanda de piscinas siga creciendo, lo que podría llevar a un mayor debate sobre la gestión del agua y la sostenibilidad en la Comunitat Valenciana.
El auge de las piscinas en la Comunitat Valenciana es un fenómeno que refleja tanto un cambio en las preferencias de los ciudadanos como un desafío en términos de sostenibilidad y gestión de recursos. A medida que la región enfrenta las consecuencias del cambio climático, es crucial considerar cómo estas instalaciones pueden ser utilizadas no solo como un lujo, sino como una herramienta para sobrellevar las altas temperaturas y mejorar la calidad de vida de sus habitantes.