La visita de Diana Morant a las Hogueras de Alicante ha estado marcada por un ambiente de tensión y descontento, reflejando la crisis que atraviesa el Partido Socialista Obrero Español (PSOE). La secretaria general del PSPV y ministra de Ciencia llegó a la ciudad el 23 de junio de 2025, en un momento en que su partido enfrenta acusaciones de corrupción que han sacudido sus cimientos. Durante su recorrido por las festividades, Morant no solo se encontró con la celebración, sino también con la crítica de los ciudadanos que expresaron su malestar hacia el gobierno y su liderazgo.
La jornada comenzó con la visita a la hoguera ganadora de este año, Baver-Els Antigons, donde Morant fue recibida por figuras destacadas del PSOE en la provincia. Sin embargo, el ambiente festivo se tornó tenso cuando, en su segunda parada, la hoguera de Séneca-Autobusos, algunos vecinos comenzaron a gritar en contra de la ministra, evidenciando el descontento generalizado hacia el presidente Pedro Sánchez y su administración. La situación se volvió aún más complicada cuando los medios de comunicación comenzaron a indagar sobre la crisis interna del partido, que ha sido alimentada por recientes escándalos de corrupción.
### La Respuesta de Morant ante la Crisis
A lo largo de su visita, Morant intentó minimizar la magnitud de la crisis, refiriéndose a los implicados en los escándalos como «tres sinvergüenzas». Esta declaración, aunque contundente, no logró calmar las inquietudes de los ciudadanos ni de los medios presentes. La ministra defendió su postura, afirmando que se limitaba a los hechos y al informe de la Unidad Central Operativa (UCO), sugiriendo que la situación estaba bajo control y que el PSOE podría completar su legislatura hasta 2027. Sin embargo, sus palabras fueron recibidas con escepticismo, dado el contexto de desconfianza que rodea a su partido.
Durante un almuerzo que tuvo lugar en una barraca, Morant se sentó con varios líderes locales del PSOE, incluyendo al exalcalde de Alicante, Gabriel Echavarrí, y otros concejales. Este encuentro, que tradicionalmente simboliza la unidad del partido, se vio empañado por la sombra de la crisis que afecta a la formación. La presencia de figuras clave del PSOE en la provincia no fue suficiente para desviar la atención de la creciente preocupación por la corrupción y la falta de liderazgo.
### La Reacción del Público y el Futuro del PSOE
La reacción del público durante la visita de Morant ha sido un claro indicador de la desconfianza que muchos ciudadanos sienten hacia el PSOE. Los gritos de protesta en la hoguera de Séneca-Autobusos reflejan un sentimiento de frustración que se ha acumulado en los últimos años. La percepción de que el partido está siendo arrastrado por escándalos de corrupción ha llevado a muchos a cuestionar la capacidad del PSOE para gobernar de manera efectiva.
A pesar de los intentos de Morant por proyectar una imagen de control y optimismo, la realidad es que el PSOE enfrenta un desafío significativo. La ministra, al ser cuestionada sobre la posibilidad de que el partido complete su mandato, se mostró confiada, pero las dudas persisten entre los votantes. La crisis de confianza no solo afecta a la imagen del partido, sino que también podría tener repercusiones en las próximas elecciones, donde los ciudadanos podrían optar por alternativas políticas si sienten que el PSOE no está a la altura de las expectativas.
La situación actual del PSOE en Alicante es un microcosmos de los problemas más amplios que enfrenta el partido a nivel nacional. La corrupción, la falta de liderazgo y la desconexión con la ciudadanía son temas que deben ser abordados con urgencia si el partido desea recuperar la confianza de sus votantes. La visita de Diana Morant a las Hogueras de Alicante ha puesto de manifiesto estas tensiones, y el futuro del PSOE dependerá de su capacidad para responder a estas críticas y restaurar la fe en su liderazgo.