En un trágico giro de los acontecimientos, trabajadores de la empresa Tragsa han encontrado los restos de una persona en el cauce del río Túria, en el término municipal de Manises. Este hallazgo, que se produjo entre las cinco y las seis de la tarde, ha suscitado una gran conmoción en la comunidad, especialmente porque se sospecha que podría tratarse de Francisco Javier Vicente Fas, conocido como Javi, quien desapareció junto a su hija Susana durante la devastadora DANA que azotó la región el 29 de octubre del año pasado. Las primeras estimaciones del médico forense sugieren que el estado y la ubicación del cuerpo son indicativos de que podría ser una víctima de la catástrofe natural que dejó un saldo de 229 fallecidos y miles de damnificados.
El descubrimiento se realizó cuando una excavadora, que formaba parte de las labores de limpieza del cauce del río, detectó lo que parecía ser un cuerpo humano. Ante esta situación, el maquinista detuvo los trabajos y alertó a la Guardia Civil, que rápidamente activó su Equipo de Policía Judicial de Alfafar para coordinar el rescate del cuerpo. La comisión judicial de Quart de Poblet y el forense de guardia también fueron convocados para examinar el cadáver en el lugar del hallazgo. Posteriormente, el cuerpo fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de València, donde se le practicará la autopsia para determinar las causas de la muerte y confirmar la identidad del fallecido.
### Contexto de la Desaparición
La desaparición de Javi y su hija Susana ha sido un caso que ha conmovido a la sociedad desde el primer momento. La tarde de la DANA, Javi había enviado mensajes a su esposa, advirtiéndole sobre la gran cantidad de agua que estaba pasando frente a su vivienda en Pedralba. Desde entonces, la familia no tuvo más noticias de ellos. Mientras que el cuerpo de Susana fue encontrado dos días después, en la playa del Mareny Blau, a más de 80 kilómetros de su hogar, la búsqueda de Javi continuó sin éxito durante meses.
El hallazgo de los restos en Manises no solo podría significar un cierre para la familia de Javi, sino que también plantea la necesidad de esclarecer otros casos de desaparecidos en la misma zona. En julio, se reportó la desaparición de Francisco Soriano, un vecino de Riba-roja que, al igual que Javi, podría haber sido arrastrado por las aguas del río. Soriano, de 69 años, había salido a pasear y no se le volvió a ver desde entonces. Las autoridades realizaron intensas búsquedas en el río, pero no lograron encontrarlo.
### La Búsqueda y el Estado del Cuerpo
La búsqueda de Javi y su hija fue extensa, involucrando tanto operativos en tierra como rastreos marinos, que incluyeron la participación de un buque de la Armada. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos, el cuerpo de Javi no fue localizado en las sucesivas búsquedas. El barro en el que fue encontrado ha jugado un papel crucial en la conservación del cuerpo, lo que explica por qué no fue descubierto antes. Este hecho ha llevado a los expertos a concluir que el cuerpo fue arrastrado por la riada y que había estado depositado en ese lugar durante un tiempo considerable.
El estado del cuerpo, que se encontraba cubierto por barro, sugiere que pudo haber estado en el fondo del río desde el momento de la tragedia. La preservación del cuerpo es notable, considerando que ha pasado casi un año desde la DANA. Este descubrimiento ha reavivado el dolor y la tristeza en la comunidad, que aún recuerda la magnitud de la catástrofe y sus devastadoras consecuencias.
La identificación oficial del cuerpo hallado en Manises es ahora una prioridad para las autoridades. Si se confirma que se trata de Javi, su familia podrá comenzar a encontrar algo de paz tras un año de incertidumbre y dolor. Sin embargo, aún quedan otros casos de desaparecidos que necesitan ser resueltos, como el de Elisabet Gil Martínez y Francisco Ruiz Martínez, quienes también fueron víctimas de la DANA. La comunidad sigue esperando respuestas y justicia para todos aquellos que han sufrido a causa de esta tragedia natural.