La reciente demanda presentada por más de 80 medios de comunicación españoles contra Meta, la empresa matriz de Facebook, ha puesto en el centro del debate la competencia desleal en el sector publicitario. Este caso, que ha captado la atención de la opinión pública y de expertos en derecho, se basa en la acusación de que Meta ha infringido el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) al utilizar datos personales sin el consentimiento adecuado de los usuarios. La Asociación de Medios de Información (AMI) representa a estos medios en un juicio que se ha desarrollado en Madrid, donde se han presentado argumentos tanto de la parte demandante como de la defensa de Meta.
La primera de las dos vistas del juicio se llevó a cabo recientemente y duró tres horas, durante las cuales tres directivos de Meta ofrecieron sus testimonios. Estos directivos, que ocupan posiciones clave en la filial española de Facebook, intentaron defender la postura de la empresa, argumentando que la recopilación de datos se realiza de manera legal y con el consentimiento de los usuarios. Sin embargo, los representantes de AMI sostienen que Meta ha violado sistemáticamente las normativas de protección de datos, lo que ha llevado a una competencia desleal en el mercado publicitario.
### La Defensa de Meta y la Cuestión del Consentimiento
Durante el juicio, los directivos de Meta enfatizaron que la clave de su éxito no radica únicamente en la recopilación de datos, sino en cómo estos son procesados y utilizados para ofrecer anuncios personalizados. Cecilia Álvarez-Rivera, directora de Política de Privacidad en Europa, afirmó que todos los datos que la compañía recopila son obtenidos con el consentimiento de los usuarios. Sin embargo, esta afirmación fue cuestionada por el abogado de AMI, quien recordó que en noviembre de 2023, Meta admitió no estar pidiendo el consentimiento explícito de los usuarios para el uso de sus datos.
La defensa de Meta se basa en la idea de que su sistema de publicidad digital, que utiliza un algoritmo para seleccionar anuncios, es similar al que utilizan otros actores en el mercado, incluidos medios de comunicación tradicionales. Según los testigos de Meta, la publicidad en sus plataformas se asigna a través de un sistema de subasta que considera múltiples factores, como la calidad del anuncio y la probabilidad de interacción del usuario. Esto, argumentan, permite que tanto grandes marcas como pequeños comercios puedan competir en igualdad de condiciones.
Sin embargo, la AMI sostiene que esta práctica no solo es desleal, sino que también pone en riesgo la viabilidad de los medios de comunicación tradicionales, que dependen de la publicidad para su sustento. La directora general de AMI, Irene Lanzaco, subrayó que este caso no es solo una cuestión empresarial, sino que también involucra la protección de los derechos de millones de ciudadanos europeos cuyos datos han sido explotados sin su consentimiento.
### Implicaciones del Juicio y el Futuro de la Publicidad Digital
El juicio contra Meta no solo se limita a la situación en España. En otros países europeos, como Francia, se están llevando a cabo procesos similares donde se cuestiona la legalidad de las prácticas publicitarias de las grandes plataformas tecnológicas. La creciente preocupación por la privacidad de los datos y la transparencia en el uso de la información personal ha llevado a un aumento en las demandas contra estas empresas, que dominan el mercado publicitario.
En 2023, las plataformas tecnológicas representaron aproximadamente el 40% de la inversión publicitaria, lo que ha generado un clima de competencia feroz entre los medios de comunicación y estas gigantes tecnológicas. La AMI argumenta que la falta de regulación efectiva y el incumplimiento de las normativas de protección de datos por parte de Meta han creado un entorno injusto para los medios de comunicación, que luchan por adaptarse a un panorama digital en constante cambio.
El juicio se encuentra en su fase final, y se espera que la sentencia se dicte en un plazo de 20 días hábiles tras la conclusión de las sesiones. La decisión que tomen los jueces no solo afectará a las partes involucradas, sino que también podría sentar un precedente importante en la regulación de la publicidad digital y la protección de datos en Europa. A medida que el juicio avanza, la atención se centra en cómo se equilibrarán los intereses de las grandes plataformas tecnológicas con la necesidad de proteger los derechos de los usuarios y la viabilidad de los medios de comunicación tradicionales.
