Un trágico suceso ha conmocionado a la comunidad de Breña Alta, en La Palma, donde una mujer ha sido detenida tras el presunto homicidio de su hija, quien padecía un autismo severo. La investigación, llevada a cabo por la Policía Judicial de la Guardia Civil, se centra en determinar si la madre actuó de manera premeditada en este desgarrador caso que ha dejado a la isla en estado de shock.
La noche del lunes, la madre, identificada como M.E.P., fue encontrada semiinconsciente en su hogar, junto al cuerpo sin vida de su hija, Rebeca, de 32 años. La joven había estado residiendo en un centro para personas con discapacidad en Los Llanos de Aridane, y solo regresaba a casa los fines de semana. Según los informes iniciales, la madre obligó a su hija a inhalar gas butano, lo que resultó en su muerte por intoxicación.
La pareja de M.E.P. fue quien descubrió la escena trágica al regresar a casa. Al entrar, notó un fuerte olor a gas y encontró a su pareja en un estado crítico, mientras que Rebeca no respondía a estímulos. Inmediatamente, alertó a las autoridades, quienes enviaron equipos de emergencia y bomberos al lugar. Inicialmente, se consideró la posibilidad de un escape accidental de gas, pero las circunstancias pronto llevaron a los investigadores a considerar el homicidio como la causa principal del fallecimiento de Rebeca.
La madre, tras el incidente, intentó quitarse la vida utilizando el mismo método que presuntamente había utilizado para acabar con la vida de su hija. Fue trasladada a un hospital en La Palma, donde se le diagnosticó una intoxicación por gas butano y un ataque de ansiedad. La situación ha generado un gran revuelo en la comunidad, no solo por la naturaleza del crimen, sino también por el contexto en el que se desarrolló.
M.E.P. es conocida en la isla por su activismo en defensa de los derechos de las personas con discapacidad. Durante los últimos meses, había expresado su rechazo a las acciones bélicas en Gaza, lo que la había convertido en una figura pública en la comunidad. Sin embargo, su vida personal ha estado marcada por la tragedia y el sufrimiento, especialmente en relación con el tratamiento que su hija recibió en el centro donde residía.
La joven, que había sido diagnosticada con un trastorno del espectro autista severo, había sido víctima de un trato denigrante en el centro de atención. M.E.P. había denunciado al exdirector del centro por prácticas vejatorias, lo que resultó en una condena judicial por maltrato a los internos. La madre había afirmado que, antes de ingresar al centro, su hija mostraba conductas sociables y una cierta autonomía, pero que su situación cambió drásticamente tras su ingreso, donde fue encontrada en condiciones deplorables.
La investigación ha sido asumida por el Equipo Territorial de Policía Judicial de la Guardia Civil de Santa Cruz de La Palma, y se han iniciado diligencias previas por un delito de homicidio. La inspección técnica del lugar del suceso fue realizada por agentes del Laboratorio de Criminalística, quienes buscan esclarecer todos los detalles que rodean este caso tan complejo y doloroso.
El impacto de esta tragedia ha resonado en toda la comunidad, que se encuentra en estado de shock ante la brutalidad del suceso. La vida de M.E.P. y su hija, que debería haber estado marcada por el amor y el apoyo, se ha visto truncada por una serie de eventos trágicos que han dejado a muchos preguntándose cómo pudo llegar a esta situación. La historia de Rebeca y su madre es un recordatorio de las luchas que enfrentan muchas familias con miembros que tienen discapacidades, y de la necesidad urgente de mejorar los sistemas de apoyo y protección para estas personas vulnerables.
La comunidad de Breña Alta, conocida por su belleza natural y su ambiente tranquilo, ahora se enfrenta a la dura realidad de un crimen que ha sacudido sus cimientos. Las autoridades continúan investigando, y se espera que en los próximos días se revelen más detalles sobre este caso que ha dejado a todos con el corazón roto.